El cuarteto llegó ayer a iTunes. Especialistas dicen que esto no es tan importante. Otros, que así terminará el reinado de Glee en Internet
Justo a esa hora, el portal de la tienda iTunes mostró una fotografía de John, Paul, George y Ringo, acompañados de la leyenda: “En 1964, la banda que cambió todo llegó a América. Ahora llega a iTunes”.
La noticia-sorpresa se hizo oficial a las 10 de la mañana y a las 11 la canción “Here comes the sun” estaba en el lugar 199 de la lista de las más vendidas en iTunes. Minutos después, se sumaron los temas “Let it be” y “Blackbird”.
El portal de CNN hizo un seguimiento puntual del asombroso volumen de ventas que generó el catálogo de The Beatles.
“A la 1:30 “Let it be” subió al número 72 y media hora más tarde ya había 15 canciones en el top 100”, reportó el sitio.
Por la tarde, el diario inglés The Telegraph reportó que “Hey Jude” ya había llegado al número 84.
Los fans no sólo compraron por canción, también se interesaron en el álbum completo. Hacia las dos de la tarde, el Abbey Road estaba en el número 12 de los más vendidos y no tardaron en aparecer el Sgt. Pepper Lonely Heart’s Club Band y las populares recopilaciones conocidas como los álbumes Rojo y Azul.
Esto sucedió a pesar de que, como documentó The Telegraph, es más caro comprar el álbum digital en iTunes que el CD físico en una tienda. “El álbum blanco cuesta 17.99 libras (unos 250 pesos) en iTunes, mientras que en cualquier tienda se puede adquirir por 14 libras (unos 200 pesos)”.
El artículo de CNN es optimista. “Que se cuiden los de Glee”, es la frase final de su artículo, en referencia a que las canciones de dicha serie han ocupado los primeros lugares de las listas en iTunes en 2010.
La verdadera dimensión de esta neobeatlemanía ocurrida en iTunes podría explicarse con una frase que dijo John Lennon en entrevista con la Rolling Stone de junio de 1975: “Nunca hay que dejar que el top ten domine el arte. Si mi preocupación se enfoca en ser juzgado por estar en el top ten, entonces mejor me rindo. Si dejo que el top ten domine mi arte, entonces el arte se muere”.